¿Qué es un texto?

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Un texto es mucho más que palabras en una página; es una ventana hacia la comunicación. Cada texto es una cuidadosa orquestación de oraciones y palabras con un propósito claro: informar, persuadir, entretener o expresar emociones. Entonces podemos decir, que un texto es una unidad de comunicación que consiste en una secuencia coherente y organizada de oraciones o palabras que tienen un propósito en específico. Este propósito puede ser informar, persuadir, entretener o expresar emociones. Los textos pueden ser escritos, como libros, artículos, mensajes en redes sociales, etc., o pueden ser orales, como conversaciones, discursos, charlas, etc.

Elementos

Párrafos
Un párrafo es un unidad de texto que agrupa oraciones relacionados que tratan sobre una idea o aspecto especifico. Comienza con mayúsculas y termina con un punto. Los párrafos ayudan a organizar y estructurar la información de manera clara y facilitan la compresión del lector u oyente. Imagina un párrafo como un pequeño universo textual, agrupando ideas relacionadas. Comienza con mayúscula y termina con un punto, guiándote a través de la historia que se desarrolla en la pagina.
 
Enunciados
Un enunciado es una declaración o expresión que transmite una idea o mensaje completo. Comienza con mayúscula y termina con un punto. Los enunciados son las unidades básicas de un texto y pueden ser simples o complejos. Los enunciados son las estrellas del firmamento literario. Cada uno es una declaración compleja, comenzando con mayúsculas y finalizando con un punto. Algunos son simples,  otros complejos, pero todo son esenciales.

Entonces, ¿Cuál es la diferencia entre Párrafos y enunciados? Un párrafo es una unidad organizada de texto que agrupa enunciados relacionados y contribuye a la estructura de un texto mas grande, mientras que un enviado es la unidad mas básica de significado y comunicación en un texto, siendo una declaración completa con inicio y fin. 

Características que hacen brillar un buen texto

Presentación atractiva: Un buen texto tiene una estructura y presentación adecuada para su propósito, con una organización lógica y clara que facilita la comprensión por parte del lector u oyente. La forma en que se presenta un texto es como su vestimenta. Una estructura clara y atractiva facilita la compresión y atrae al lector.

Debe tener un intención clara: Cada texto tiene un propósito especifico, ya sea informar sobre un tema, persuadir a alguien de algo, entretener o expresar emociones y opiniones. Esta intención guía la selección del contenido y el tomo del texto. Cada texto nace con un propósito en mente. Ya sea educar, convencer o simplemente deleitar, esta intención guía su construcción y tono.

Claridad, la luz en la oscuridad: La redacción del texto se diseña de forma que sea fácilmente comprensible para el publico al que esta dirigido. Se evitan jergas o tecnicismos innecesarios que puedan dificultar la comprensión. Un buen texto es como un farol en la noche, ilumina sin deslumbrar. Es claro accesible y comprensible para todos.

Cohesión, el Hilo Invisible: La cohesión en un texto implica que las diferentes partes del mismo están conectadas de manera lógica y fluida. Las ideas se presentan en un orden que permite seguir el hilo argumentativo o narrativo sin confusiones. Un buen texto es como un tejido unido firmemente. Sus ideas están entrelazadas de forma lógica y fluida, guiando al lector a través del camino. 


Coherencia, el Pegamento de las Ideas: La coherencia se refiere a la relación lógica y consistente entre las ideas y partes del texto, asegurando que el lector pueda seguir y comprender el mensaje de manera fluida. La coherencia es el pegamento que une las piezas del rompecabezas textual. Todas las ideas están en su lugar, creando un mensaje claro y comprensible.

 

Perfección escrita: Un buen texto debe estar libre de errores gramaticales, ortográficos y de estilo. La revisión y corrección son esenciales para mantener la calidad del texto. Un buen texto se presenta pulido y refinado. Sin errores, sin imperfecciones. Una revisión a conciencia asegura su calidad. 


Lenguaje adecuado: El texto utiliza un vocabulario y una estructura gramatical apropiada para su tipo y propósito. Adaptarse al público objetivo y al contexto es fundamental para que el mensaje se transmita eficazmente. Cada texto tiene su propia voz. Usar el lenguaje adecuado para el propósito y el público es clave para una comunicación efectiva. 








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